La mujer más acaudalada de América. En plena juventud asumió personalmente la dirección del mineral de carbón de Lota, desde 1873 hasta 1881, para modernizar la empresa, esta visionaria dama, manda a construir la primera planta Hidroeléctrica de Chile y Sudamérica a don Thomás Alva Edison, quien por medio de una carta la felicita personalmente alabando su realización.
Viviendo en Quintero, junto a su esposo Luis Cousiño Squella, con su particular vena emprendedora, construyeron un verdadero poblado; un depósito de madera de la Compañía de Quintero, edificio para una fábrica de ladrillos, sólidas casas destinadas para el turismo en este incipiente Balneario.
También deja las bases cimentadas en la “Compañía de Quintero”, a su hijo mayor Luis Alberto Cousiño Goyenechea, para desarrollar un gran proyecto para la construcción de un puerto, un ferrocarril y un balneario, es decir, “una ciudad moderna”.
Gran filántropa, a su fallecimiento ocurrido en París en el año 1897, donde sus restos fueron trasladados a Chile, con un gran homenaje de sus trabajadores mineros, dispuso que con parte de su fortuna se construyera una iglesia en Lota y de una iglesia y hospital en Buen Retiro, este último debía esta compuesta para una gran sala de hospital para mujeres, una sala para niños y una escuela. También dispuso la construcción de dos escuelas más y un asilo para mineros inhabilitados.
1872 Joven y acaudalado empresario, motivado por el insigne historiador, abogado, político don Benjamín Vicuña Mackenna, llegan a Quintero para conocer las especiales bondades de su bahía y península Los Molles, para proyectar un negocio comercial, habitacional y turístico.
Vicuña Mackenna, otro emprendedor, era propietario de una Hacienda en Santa Rosa de Colmo, su idea era hacer de Concón un gran balneario, y consideró que Cousiño podría complementarlo con el desarrollo en el vecino Quintero.
Convencido y orientado por su visión emprendedora y empresarial, Cousiño compra los terrenos de Quintero a don Francisco de Paula Salas.
Cousiño Squella, era hijo de don Matías Cousiño Jorquera, considerado el más grande de los pioneros del progreso económico de Chile en el siglo XIX. Luis, hijo único heredero universal de don Matías. Recibiendo los yacimientos de Coronel y la mitad de Lota, la otra era de la familia Goyenechea Gallo. En 1863, al fallecer don Matías compra la otra mitad, extendiéndose sus actividades a la extracción del cobre. De igual modo era propietario de la mina de plata de Chañarsillo e introdujo en Chile la industria de la seda.
Huérfano de madre, su educación estuvo a cargo de doña Luz Gallo, madrastra, y se crió junto a sus hermanastros Emeterio e Isidora Goyenechea Gallo, quién fuera posteriormente su esposa. Casándose en el año 1855 con doña Isidora, teniendo 7 hijos, Alfredo, Luis Alberto, Carlos Roberto, Luis Arturo, Adriana, Loreto y María Luz.
Falleció en Perú en 1873, un año después de haber comprado Quintero, a la edad de 38 años de tuberculosis.
La mujer más acaudalada de América. En plena juventud asumió personalmente la dirección del mineral de carbón de Lota, desde 1873 hasta 1881, para modernizar la empresa, esta visionaria dama, manda a construir la primera planta Hidroeléctrica de Chile y Sudamérica a don Thomás Alva Edison, quien por medio de una carta la felicita personalmente alabando su realización.
